De acuerdo a la Real Academia Española, la simbiosis es la asociación de individuos animales o vegetales de diferentes especies, sobre todo si los simbiontes sacan provecho de la vida en común.
El Término viene del griego, y Anton de Bary fue el botánico que acuño el término entre 1873 y 1879, para definir la vida en conjunto de dos organismos disimilares y por lo general con efectos benéficos para al menos uno de ellos.
Pero en el contexto de lo eterno, hablaremos de la simbiosis espiritual, la asociación que existe entre dos almas afines, que si bien pudieron ser creadas al mismo tiempo (tal es el caso de los gemelos) también se presenta entre personas que han convivido por mucho tiempo, es decir: crecido juntas.
Es común saber de gemelos que comparten un vinculo elemental, lo que siente uno, lo sentirá el otro. Pero en el segundo caso, el de las llamadas almas gemelas, la simbiosis se logra luego de haber compartido experiencias tanto buenas y malas, mismas que forjan entre ambas personas el mismo vínculo de los gemelos, incluso mayor.
Existen casos registrados en Europa, como el de dos soldados ingleses que durante la Segunda Guerra Mundial fueron a misiones distintas y al morir uno de ellos, el otro experimento dolor en donde su amigo había sido herido. Incluso las enfermedades pueden compartirse cuando el vínculo es puro.
El espíritu humano es basto e intangible, lo que le permite penetrar en otros cuerpos y fundirse con otros espíritus... y tú ¿lo has experimentado?
